El
ITER, siglas de
Reactor Experimental Termonuclear Internacional, será el
experimento más caro en la historia de la humanidad, cuando entre en funcionamiento allá por 2023. Con este reactor se busca crear una nueva fuente de energía sustentable que elimine nuestra adicción a los combustibles fósiles; pero eso si, la inversión inicial ya ha sido de 13,000 millones de euros.
El reactor está situado en
Francia y es producto de la colaboración entre
China,
India,
Japón,
Corea del Sur,
Rusia,
Estados Unidos y la
Unión Europea. Lo que se busca con este proyecto es lograr la tan ansiada
fusión nuclear, proceso que realizan todas las estrellas del universo y del cual se desprende una gran cantidad de energía, que no genera residuos pero de momento no ha sido controlada totalmente.
En la fusión nuclear dos núcleos atómicos forman uno nuevo, de menor masa atómica que la suma de ambos, siendo la masa faltante liberada en forma de energía. Para llevar a cabo la fusión requerimos litio y deuterio, de los cuales existen bastante reservas en el mundo, tantas que podrían satisfacer la
demanda de energía mundial a lo largo de millones de años.
El
ITER pesará unas 23,000 toneladas y su altura será de 60 metros de altura; de momento las partes están siendo fabricadas en seis países debido a la magnitud del proyecto, que incluye 80,000 kilómetros de cables superconductores de niobio-estaño que se usarán para los
imanes del reactor. Además se requerirán 18 electroimanes de 14 metros de altura y 360 toneladas de peso cada uno.
Se estima que el costo total del
ITER alcance los 16,000 millones de euros, lo que representa el doble del famosísimo
CERN; es por esta razón que se requiere de la participación de casi todas las potencias mundiales, pues una sola nación difícilmente podría sobrellevar esta inversión.
Vía:
ITER